Los sutras budistas son las enseñanzas del Buda Shakyamuni compiladas por sus discípulos. Hace más de 2500 años, el Buda daba sus enseñanzas a las orillas del rio Ganges según las diferentes aptitudes y capacidades de los oyentes para responder a sus preguntas sobre la vida y ayudarles a resolver sus aflicciones mentales. Las enseñanzas que se registran en los sutras son la sabiduría de la vida que el Buda demostró para guiar y transformar a los seres sintientes.

Los sutras budistas en chino que podemos ver hoy son obras traducidas por grandes patriarcas y maestros budistas antiguos, incluidos maestros de renombre, tales como Kumarajiva y Xuanzang. Por ejemplo, el Sutra del Corazón, el Sutra del Diamante, el Sutra del Loto, el Capítulo de la Puerta Universal del Sutra del Loto, el Sutra del Buda Amitabha, el Sutra de los Votos Fundamentales del Bodhisattva Ksitigarbha (el Sutra del Tesoro de la Tierra), el Sutra del Buda de la Medicina, el Sutra de Vimalakirti, el Sutra Avatamsaka (el Sutra de la Guirnalda) y el Sutra de la Plataforma del Sexto Patriarca, son todas escrituras Mahayanas muy conocidas y populares entre los practicantes del Budismo chino.

Desde la antigüedad, los patriarcas y los grandes maestros budistas han animado a los seguidores del Buda a leer los sutras. Leer los sutras pertenece a la primera de las Tres Sabidurías, a saber, la sabiduría de escuchar, la de contemplar y la de meditar. Además de leer y recitar los sutras budistas, uno también necesita comprender el significado de sus contenidos, cultivar el conocimiento correcto sobre el Budismo y emular las virtudes y acciones de los Budas y Bodhisattvas, para poder corregir nuestros comportamientos.

El Maestro Sheng Yen, fundador de la Montaña Tambor del Dharma, no solo leía los sutras él mismo, sino que también daba charlas sobre ellos, animando a sus discípulos a profundizar en las escrituras budistas para desarrollar la sabiduría. Además, el Maestro Yin Shun también mencionó en su libro “El Camino a la Budeidad” que después de tomar los Tres Refugios, los seguidores del Buda deben escuchar las enseñanzas auténticas del Buda con más frecuencia para poder entrar genuinamente en el camino budista. Además, aprender el Dharma a través de leer los sutras es la puerta de entrada para iniciar la práctica budista.

Al igual que otras obras literarias, las escrituras budistas también siguen un formato estándar, cuyo contenido gira en torno a un tema determinado, un personaje, asunto, lugar y objeto. Siempre que conozcamos la estructura básica de los sutras y tengamos unos conocimientos preliminares, comprender el contenido de los sutras no es nada difícil en absoluto. Tomemos como ejemplo el Sutra del Corazón, una de las escrituras budistas más conocidas entre los practicantes del Budismo chino, cuyo protagonista es el Bodhisattva Avalokitesvara (Guan Yin, en chino) e ilustra el tema de la “vacuidad” en su sentido más elevado.

Los sutras budistas normalmente comienzan con la frase "Así he oído" y concluye con la línea "todos escucharon las palabras del Buda y se llenaron de gozo y confianza y, en consecuencia, comprometiéndose a poner en práctica las enseñanzas". El contenido de los sutras se divide generalmente en tres secciones principales: introducción, cuerpo principal y difusión, de las cuales la sección de introducción y la de difusión dan cuenta, respectivamente, de la autenticidad y la importancia del sutra, mientras que la sección del cuerpo principal ilustra el contenido esencial del sutra.

En la sección del cuerpo principal, a menudo podemos ver cómo el Buda usó metáforas, causas y condiciones, así como las historias de sus vidas anteriores, como un medio para inspirar a los oyentes a aceptar la sabiduría del Budadharma. Por ejemplo, el Sutra Vimalakirti presenta un diálogo de preguntas y respuestas entre el practicante laico Vimalakirti y el Bodhisattva Manjushri, con el objetivo de entrar en detalle sobre cómo los budistas laicos deben cultivar su mente, así como acerca de la filosofía Mahayana del Camino del Bodhisattva.

Al abrir cualquier sutra budista, antes de su título y el contenido principal podemos encontrar los Versos de Apertura del Sutra que dicen: “El Dharma supremo, profundo y sutil es difícil de encontrar en el lapso de cientos de miles de millones de períodos cósmicos. Ahora puedo verlo, escucharlo, recibirlo y practicarlo, aspiro a comprender el verdadero significado de las palabras del Tathagata (Buda)". Estar en posesión de un valioso cuerpo humano, lo cual es difícil de alcanzar, es realmente una gran bendición, sin mencionar haber nacido en una época en la que uno puede tener acceso a abundantes recursos para aprender el Budismo, además de tener la oportunidad de escuchar las enseñanzas budistas, estudiar los sutras y dedicarse a la práctica budista. Así que comencemos a leer los sutras y recibamos las enseñanzas del Buda.
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