Practicando el camino hacia la Budeidad - Servicio de arrepentimiento del Emperador Liang del Centro de Meditación Chan en Nueva York

La Ceremonia de Bendición de la Gran Compasión de seis días se llevó a cabo en el Centro de Meditación Chan de la Montaña Tambor del Dharma (DDM, por sus siglas en inglés) en Nueva York del 22 al 27 de noviembre. El contenido de la ceremonia fue el Servicio de Arrepentimiento del Emperador Liang y la práctica de tres sesiones de concentración en el nombre del Buda . Debido a la pandemia de COVID-19 en curso, la ceremonia se llevó a cabo principalmente mediante videoconferencia. Además de los voluntarios presenciales que ayudaron con la ceremonia, solo un pequeño número de asientos estuvieron disponibles para los participantes. Sin embargo, todos fueron animados a participar en el servicio de arrepentimiento a través de Internet, transfiriendo así los méritos resultantes a todos los seres sintientes. A través de la ceremonia de bendición, se espera que la pandemia llegue a su fin muy pronto y que todos los seres sintientes puedan liberarse del dolor y el sufrimiento y alcanzar la felicidad.

Este año, el Centro de Meditation Chan invitó a la Venerable Guo Guang para dar todos los días conferencias del Dharma en vivo en línea desde el centro budista de la DDM en Nueva Jersey. La Venerable Guo Guang comenzó con el Agama Sutra, colecciones del Budismo antiguo, combinadas con el contenido del Servicio de Arrepentimiento del Emperador Liang, para explicar causas y condiciones, obstrucciones kármicas, causa y efecto y otras enseñanzas budistas relevantes. La Venerable Guo Guang usó la sal como una metáfora para explicar cómo se pueden mitigar las consecuencias de malas acciones graves, resultando en una retribución kármica más leve. Al hacerlo, la Venerable Guo Guang deseaba nutrir y cultivar la fe de los devotos en el aprendizaje del Buddhadharma.


La Venerable Guo Guang señaló que enfrentar el karma negativo pasado de uno es como tragar un cuenco de sal. Sin practicar el Budismo, uno está destinado a sufrir la retribución kármica. No obstante, supongamos que practicamos el arrepentimiento y prometemos beneficiar a todos los seres sintientes, cultivando así la sabiduría y los méritos. Al hacerlo, aunque la retribución kármica de uno es inevitable, la práctica budista reducirá o incluso eliminará la percepción del sufrimiento. Esto es análogo a diluir un cuenco de sal con un flujo continuo de agua; al hacerlo, su salinidad podría llegar a ser muy baja. Ésta es la razón por la que los Bodhisattvas temen a las causas, mientras que los seres ordinarios temen los efectos y las retribuciones. Lo que podemos hacer es esforzarnos en la práctica del Dharma con diligencia.

Min Shi, una practicante budista que acompañaba a sus padres a participar en el Servicio de Arrepentimiento del Emperador Liang del Centro de Meditación Chan, comentó que al escuchar las charlas de Dharma y aprender la forma adecuada de hacer las postraciones de arrepentimiento, obtuvieron una comprensión clara de las doctrinas centrales de las enseñanzas budistas y lograron una completa sensación de relajación. Fue la primera vez que participaron en una asamblea del Dharma y la encontraron de gran beneficio. Querían seguir practicando el Budismo con diligencia, así como aprender a dedicarse a la práctica del arrepentimiento para cambiar las fuerzas kármicas, sumergiéndose profundamente en el Dharma e integrando el conocimiento y la comprensión relevantes en las prácticas Chan.

Al organizar la Ceremonia de Bendición de la Gran Compasión, el Centro de Meditación Chan de la DDM esperaba transferir los méritos para que todos encontraran la paz de la mente y el cuerpo, para orar por el fin a la pandemia y para que todos los seres sintientes se liberaran del sufrimiento y alcanzaran la felicidad.

 
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