Práctica Chan virtual: el Centro Budista de la Montaña Tambor del Dharma de Malasia ofrece su primera clase de meditación en línea para principiantes
El Centro Budista de la Montaña Tambor del Dharma de Malasia celebró su primera clase de meditación en línea para principiantes el 27 de febrero y el 7 de marzo. Dirigidos por la Venerable Yan Feng y la Venerable Yan Ming y acompañados por 20 voluntarios, 60 participantes aprendieron los conceptos y los métodos de práctica Chan basados en el Linaje Tambor del Dharma del Budismo Chan.
Durante la actividad para romper el hielo del primer día, los miembros de cada grupo compartieron con entusiasmo por qué asistieron a esta clase y qué esperaban aprender. Las Venerables elogiaron a los participantes por sus buenas raíces kármicas al dedicar felizmente dos días para aprender cómo calmar el cuerpo y la mente. Teniendo en cuenta la pandemia aún en curso que refleja la naturaleza impermanente de los fenómenos mundanos, los conceptos y los métodos de práctica Chan se pueden utilizar mejor para evitar que nuestra mente se vea afectada por las circunstancias. Además, estas prácticas permiten que nuestro cuerpo y nuestra mente permanezcan con calma en el aquí y ahora, independientemente de cómo cambie el entorno. Los sutras budistas también nos recuerdan lo raro y extraordinario que es nacer humano y escuchar las enseñanzas del Dharma del Buda. Esto es análogo a una tortuga ciega nadando en un océano que solo sale a la superficie una vez cada 100 años y asoma su cabeza por el agujero de un tablón de madera que flota al azar. Las posibilidades de que esto suceda son simplemente infinitesimales. Por lo tanto, la Venerable instó a los participantes a apreciar esta oportunidad y aprovechar al máximo el curso de dos días.
La clase de meditación proporciona a los principiantes una hoja de ruta completa para aprender la práctica Chan. La Venerable primero presentó los conceptos básicos requeridos, la mentalidad, los aspectos funcionales y las herramientas, y luego guió a los participantes a practicar la meditación sentada, experimentar la relajación, sentir la facilidad de la respiración y postrarse ante el Buda utilizando el método de práctica Chan. Hacia el final del curso, los participantes expresaron su agradecimiento por la oportunidad de unirse a esta actividad de aprendizaje virtual. Con el abundante contenido del curso y la guía monástica, los participantes se dedicaron devotamente a practicar los métodos y disfrutaron plenamente del proceso. Finalmente, durante la sesión de intercambio, todos los participantes estaban de acuerdo de que el final de esta clase es solo el comienzo de su práctica del Dharma. Además, aspiraban a participar continuamente en las actividades de práctica virtual de la DDM, para aprender y crecer juntos.