R: Incluso cuando estamos acostados en la cama del hospital y recibiendo atención de los profesionales médicos y familiares, aún podemos ayudar a otros. ¿Cómo podemos ayudar? Recitando el nombre del Buda. Hay tantas personas en el hospital, pero, ¿cuántas de ellas saben recitar el nombre del Buda? Recitar el nombre del Buda no solo calma nuestra propia mente, sino que también sirve como una práctica espiritual de virtud meritoria. Cuando estés aburrido acostado en una cama sin nada que hacer, puedes recitar el nombre del Buda con más frecuencia. Antes de acostarte a dormir, junta las palmas de las manos y dedica el mérito: “El Buda Amitabha de la bondad amorosa y la compasión, ahora dedico el mérito de la recitación de hoy a cada uno en el hospital, deseándoles una pronta recuperación”. Al generar continuamente buenos pensamientos y desear bendiciones para los demás, estás ayudándolos de otra manera, incluso mientras estás confinado en la cama. Esto demuestra que todavía puedes ayudar a los demás. Tener la capacidad de bendecir a otros es la mayor felicidad.

El valor de la vida no radica en su longitud, sino en su significado. La vida es limitada, y el nacimiento humano es difícil de lograr. Mientras sigamos respirando, todos y cada uno de los días de práctica aportan los méritos correspondientes. Por lo tanto, aprovechemos cada momento y recitemos el nombre del Buda Amitabha siempre que tengamos tiempo.

 
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