108 Aforismos de Sabiduría
No importa que si uno encuentre la bendición , sigue cultivando las bendiciones; reconoce y recuerda la amabilidad de los demás y no olvides devolverla.
Una mente amable y compasiva solucionará cualquier rivalidad; una mente sabia disipará cualquier desconcierto.
Conserva las Tres Joyas con reverencia, difunde el Dharma y beneficia a los demás con una mente pura.
Contempla cada experiencia de la vida con gratitud, aprovecha la vida diligentemente.
Las virtudes se cultivan a través de la contrición, las obstrucciones kármicas se eliminan a través de una mente arrepentida.
Mientras procuras que no se seque nuestra fuente de agua, aprecia y devuelve la amabilidad de los demás para que la cadena de amabilidad prosiga.
La persistencia te ayudará a superar todo, la resistencia te ayudará a conseguir todo.
Tu mente y mi mente son iguales a la de Buddha; reconoce, aprecia y conserva nuestras bendiciones.
Devuelve una gota de amabilidad generosamente; paga una ración de comida con mayor devoción.
Cuando tengas agua para beber, compártela con los demás; cuando recibas amabilidad de otros, corresponde con gratitud.
Desata el nudo del amor y el odio, de las pasiones y la enemistad; en su lugar, aprende con generosidad de la amabilidad y la compasión, de la empatía y la ecuanimidad.
La amabilidad de los padres es más grande que el cielo y la tierra; las virtudes de las Tres Joyas superan en número a los incontables granos de arena del Ganges.
Agradece y devuelve la amabilidad de los otros. Evita cualquier desorden emocional que cause sufrimiento.
De la gratitud nacerán las bendiciones que te acompañarán toda la vida; del odio, obstáculos que te seguirán para siempre.
No utilizar la propia riqueza en beneficio de los demás es como vestir con elegancia a oscuras y sin que nadie lo vea: es vano y necio.
El valor de administrar bien la riqueza está en la generosidad. Poseemos dinero para cultivar bendiciones.
Cultiva bendiciones y la riqueza familiar podrá durar siglos; sé egoísta y la fortuna familiar no sobrevivir á tres generaciones.
Uno encontrará alegría duradera si está al servicio de los otros. Crea condiciones favorables siempre que te sea posible; de lo contrario, te arrepentirás.
Siembra tus semillas, deshierba y abona tu campo, sé agradecido cuando coseches con abundancia y reza para que tengas más años auspiciosos.
Quienes buscan bendiciones primero tienen que sembrar, cultivar y apreciar la semilla de las bendiciones; quienes buscan riqueza primero deben crear causas y condiciones favorables; quienes buscan longevidad primero tienen que cuidar el cuerpo y la mente; quienes buscan buena suerte primero deben ser amables y tratar a los demás con amabilidad.
Reflexiona sobre ti mismo con contrición; ten en cuenta que no has hecho ni has dado lo suficiente, ni para ti ni para los demás.
Reflexiona siempre sobre ti mismo con contrición. Sin la reflexión sobre el propio comportamiento, siempre estarás en peligro de perder el rumbo.
Contempla el mundo con gratitud. Si uno no es agradecido y no devuelve la amabilidad de los otros, la buena suerte lo abandonará.
Para vivir felices, sed agradecidos, respetaos mutuamente, aprended el uno del otro, perdonándoos, amándoos, apoyándoos.
