"Inspiración de una experiencia cercana a la muerte": programa Té & Charla organizado en el Centro de Meditación Chan

El 11 de junio a las 2 p.m. el Centro de Meditación Chan organizó el programa Té & Charla "Inspiración de una experiencia cercana a la muerte" dirigida por Chao-Pin Hsiao (Pin), enfermera científica y profesora asociada en la Universidad Case Western Reserve, cuya especialidad es la ciencia de los síntomas en oncología.

Pin compartió cómo se ahogó accidentalmente mientras viajaba por Japón durante su juventud. Estuvo cerca de la muerte hasta que fue rescatada con éxito por RCP. Habló sobre las experiencias cercanas a la muerte comunes, como las retrospectivas, la separación del cuerpo y la mente, y el regreso al cuerpo al resucitarse, y comparó sus experiencias con ellas. Los participantes expresaron sus opiniones libremente. Al comprender la experiencia cercana a la muerte, aprendieron a enfrentar la vida y la muerte con sabiduría.

Pin dijo que después de experimentar su experiencia cercana a la muerte, se sintió afortunada de poder "regresar" y comenzó a reexaminar su vida. Mientras se dedicaba a la labor médica, se sintió conmovida por las enfermedades y el sufrimiento de los pacientes terminales de cáncer con metástasis. Todo esto se convirtió en la motivación para su práctica budista. Se arrepintió de discutir con sus hermanas y aprendió a reflexionar sobre sí misma. Se volvió más gentil, más inclusiva y perdonaba a los demás más fácilmente. Mientras tanto, ella era más decisiva y se esforzaba al máximo en todo lo que hacía. Pin animó a todos a apreciar el momento presente y llevar sus vidas de manera positiva.

Algunos participantes compartieron que experimentaron la separación del cuerpo y la mente mientras estaban bajo estrés mental y preguntaron si este tipo de separación puede ocurrir durante la práctica de la meditación y cómo manejarla. LA Venerable Chang Hwa, directora del Centro de Meditación Chan, animó a todos a practicar la atención plena y la unificación del cuerpo y la mente. Ella les recordó a los participantes que no "se aferren a" ni "jueguen" con ninguna experiencia durante la meditación, sino que sean conscientes de ellas y regresen al método de inmediato.

Grace Fu, una voluntaria del grupo de canto por los difuntos del Centro de Meditación Chan, compartió que en una ocasión después de la charla del Dharma de la Venerable y ocho horas de recitar el nombre del Buda Amitabha por los difuntos, observó que el rostro del practicante fallecido era sereno y el cuerpo se había vuelto menos rígido. Esta experiencia fortaleció su fe en el Budadharma. Además de persistir en la práctica diaria, Grace está tratando de simplificar su vida y reducir su dependencia y apego a las cosas materiales. Esperaba que todos, incluida ella misma, pudieran hacer buenas conexiones con los seres sintientes y recordar ser conscientes y recitar el nombre del Buda de todo corazón, incluso cuando se enfrentaran a situaciones de vida o muerte.
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